martes, 15 de octubre de 2013

¡El calcetín de lana parte la pana!



Hoy es martes y hoy es el día de nuestra prematura sección : "Mamá no quiero unos leggins, quiero unas mallas de compresión". Es decir, hoy toca hablar de ropa. 

Evidentemente el calcetín de lana no parte nada, estos es mejor guardarlos para cuando vayamos al pueblo. 

Anteriormente hemos hablado sobre la elección de nuestras zapatillas para correr, ahora es el turno de hablar de su fiel acompañante, los calcetines. Para muchos, cuando nos iniciamos en el running, es una de las piezas de ropa que menos importancia le damos, cualquier calcetín que tenemos por casa nos sirve.

Pues no, eso ha de cambiar, hay que elegir correctamente los calcetines que llevamos cuando vamos a practicar el running. Muchas veces hemos hablado que lo primordial es la comodidad, pues los calcetines pueden ser causantes de incomodad, de lesiones, incluso de menor rendimiento. Los calcetines deben ser sin costuras o con costuras planas, para evitar futuras rozaduras. Al mismo tiempo se debe ajustar bien a nuestro pie, pero nunca en exceso, y hemos de evitar que se generen pliegues que pueden provocarnos ampollas. Una buena opción es utilizar calcetines antideslizantes, para que se mantenga bien sujetos a nuestros pies y no se muevan mientras corremos.

Hay que tener en cuenta que existe una gran variedad de calcetines. Podemos distinguirlos según sus materiales, espesores o tamaños.

Lo más aconsejable es prestar atención al material del calcetín que nos vamos a comprar. No se debe utilizar calcetines 100% algodón, pues el algodón se moja, se mantiene húmedo. Por lo tanto, cuando los pies sudan o se mojan, la humedad permanece, no se evacua. En invierno el algodón puede hacer que los pies se sientan fríos y húmedos y en verano nos puede causar ampollas. Por lo tanto debemos utilizar calcetines hechos de materiales sintéticos, como poliéster o acrílicos, porque van absorber la humedad. 


En definitiva debéis tener en cuenta dos cosas: La comodidad y el material del calcetín.


En cuanto a precio suelen ser caros, alrededor de unos diez o quince euros, dependiendo de la marca. Pero en el Lidl podéis encontrar ofertas muy buenas en cuanto a textil. Yo hace unos meses me compré unos calcetines ergonómicos y de poliéster, como los que veis en la foto, por tres euros, y la verdad que me han ido de maravilla.